jueves, 9 de enero de 2014

NALA



A lo largo de 2013 ocurrieron muchas cosas, unas alegres, otras tristes, otras menos tristes, otras menos alegres. Y casi acabando el año ocurrió lo que ninguno queríamos que ocurriera, pero era irremediable, ello fue la muerte de nuestra querida perrita Nala, era tan triste verla cada día más y más delgadita, cayéndose a cada paso y oyendo el ruido que hacían sus huesos de lo delgadita que estaba. Quince años había vivido con nosotros y aquella mañana del 21 de Diciembre la llevábamos mi marido, mi hija Amparo y yo a la veterinaria a que la durmieran, que tristeza tan grande y que llorera cogimos los tres.

Cada pequeña cosa me hace acordarme de ella, a mi y a todos. Por las mañanas miramos su sitio, vacío, cuando recojo la mesa y me voy a la cocina, siempre estaba detrás esperando a ver si le daba algo.